Alfonsina, Montse, Fernando, Anna, Gonzalo, Juan José, Mar y José Ángel saben bien lo que supone participar en ferias de artesanía y se han animado a compartir sus experiencias en este post.
Además de contarnos en qué mercados suelen estar presentes de los más de 101 mercados artesanos que se celebran cada año en España, hablarnos de lo mejor y lo peor de ellos y compartir alguna que otra anécdota curiosa, nos dejan valiosos consejos que les hubiera gustado conocer cuando empezaron.
Si alguna vez has participado en una feria de artesanía te sentirás identificada con ellos.
Si aún no lo has hecho, vas a agradecer todo lo que vas a aprender hoy 🙂
Te dejo con sus respuestas a las preguntas que les hice:
- ¿En qué ferias sueles participar a lo largo del año?
- Según tu experiencia, ¿qué dirías que es lo mejor de vender en ferias? ¿Y lo peor?
- Háblanos de alguna anécdota curiosa que te haya ocurrido.
- Volviendo a tu primera experiencia en una feria, ¿qué consejo te darías a ti misma si pudieras volver atrás?
Allá van 😉
– ¿En qué ferias sueles participar a lo largo del año?
En España hay un Festival Internacional específico de patchwork que para mí es muy interesante porque reúne a las quilters y ahí es donde hago demostraciones, tengo mis productos en tiendas y me acerco a la gente para conocerles y compartir.
Luego está Creativa, que hace ferias todo el año en distintos lugares, como Madrid, Barcelona, Bilbao, Valencia… pero sólo asisto a alguna porque no son específicas y puede haber mucha gente pero de otras actividades como el craft, que no son mi audiencia.
– Alfonsina Uriburu de Quilting Colors
Participo en varias ferias a lo largo del año y todas ellas tienen en común que son de artesanía. Suelen ser ferias largas y en ciudad: Vigo, Coruña, Ourense, Toledo, Madrid, Ibiza, Guadalajara y también fuera de España con menos frecuencia, pero sí cada dos años en Milán y París.
Suelo participar en la Muestra de Artesanía Aragonesa durante las fiestas del Pilar en Zaragoza y en la Feria de Artesanía Aragonesa durante el puente de la Inmaculada-Constitución.
Participé también durante unos años en L’Artigiano in Fiera de Milán, Italia, pero por lo complicado que resultaba toda la logística y por solapamiento de fechas con otras ferias dejé de ir.
Soy una amante de mi trabajo y esto define también un estilo de vida. No he sido nunca una feriante si por ello entendemos a la persona que vive de las ferias. Sí que he participado en ferias profesionales y en otras abiertas al público en general. En la actualidad asisto a algunas, la mayoría en aquellas donde se exige que el artesano que expone sea profesional en su oficio. Este año asistiré al Portal del Ángel de Barcelona, a la Feria de Artesanía en el Auditorio de Zaragoza y a la Feria de Salamanca. Luego asisto a algunas de algún municipio donde me invitan o me interesa porque puedo hacer una demostración del oficio remunerado o imparto un taller.
– Anna Albert de Art en seda
Desde siempre a todas las ferias a las que hemos asistido han sido porque nos han invitado a asistir a ellas. Y nosotros sólo participamos en ferias de artesanía o bien de alfarería y cerámica. A día de hoy participamos en unas cuatro o cinco ferias o exposiciones al año.
– Gonzalo de Alfarería Aparicio
No tengo ferias prioritarias. Cuando me llega información de una feria de artesanía estudio la fecha y la duración y según la disponibilidad que yo pueda tener en esos momentos, que dependerá del trabajo que pueda tener en el taller decido si participo. Pueden ser ferias y mercados que se celebran en pueblos de la provincia de Sevilla, Cádiz o Huelva.
He realizado cientos de ferias de artesanía y de muestras organizadas por los ayuntamientos y asociaciones de los pueblos de estas provincias que he mencionado con la intención de promocionar mi taller, más que para vender en ellas, para darle una mejor visibilidad y dar a conocer nuestros productos en general: rejería tradicional andaluza, mobiliario, etcétera.
– Juan José de Forja Lebrija
Las ferias que hacemos son dos: la Feria de Artesanía Aragonesa del Pilar, para las fiestas del Pilar en Zaragoza, y la Muestra de Artesanía Aragonesa, también en Zaragoza, que se realiza en la sala multiusos auditorio de Zaragoza.
– Mar Berdejo de Artesanía en piel Berdejo
Durante los últimos diez años he asistido a ferias por toda España. Siempre de cerámica y alfarería o de Artesanía. Este tipo de ferias son en las que más se valora nuestro trabajo. Puedo destacar la Feria de San Isidro de Madrid, la feria de San Pedro de Zamora o la de Santa Cruz de Oleiros en La Coruña.
– José Ángel de Severino Boix
– Según tu experiencia, ¿qué dirías que es lo mejor de vender en ferias? ¿Y lo peor?
Realmente hasta ahora no he puesto stand propio en ninguna feria, porque eso me limitaría y no me interesa competir con las tiendas, que son al final también mis clientes. Tengo productos con distribuidores que llegan al cliente final con las tiendas. Lo mejor es que puedo hacer el marketing directamente con la gente.
Lo peor es que no los tuvieran disponibles, ya que no tengo control sobre lo que compran las tiendas.
– Alfonsina Uriburu de Quilting Colors
Lo mejor es que puedo valorar objetivamente si mi producto gusta o no. El contacto directo con el público me gusta muchísimo y cuando a una mujer le queda especialmente bien una joya nuestra me vuelvo loca.
Lo peor de las ferias es el traslado, montaje y desmontaje.
Lo mejor de vender en ferias es sin duda el contacto directo con el cliente, y si son ferias locales, la “cartera” de clientes que vas haciendo. Creo que las ferias pueden generar clientes fieles.
Lo peor de las ferias es que quedan bastante al albur de las fechas, según caigan en un día u otro puede variar mucho la afluencia de gente y, por lo tanto, las ventas. Tampoco es positivo la imagen que a veces damos los propios artesanos en la exposición, el intrusismo entre sectores y calidad del producto.
Lo mejor de asistir a una feria es el tener contacto con el público, conocer el impacto que supone tu producto y aprender de ello para poder evolucionar. Si no tienes el feedback del cliente te quedas estancado. Oferta y demanda siempre tienen que ir de la mano.
Lo peor de una feria es el trabajo que nadie ve. Es muy duro el montaje, estar de pie muchas horas y siempre estar dependiendo de que asista suficiente público y con ganas de comprar.
– Anna Albert de Art en seda
De todas las ferias a las que vamos o hemos ido alguna vez, lo mejor desde mi punto de vista, dado que no solemos asistir a muchas a lo largo del año, es siempre el compañerismos con el resto de artesanos: comentas cosas de la profesión y hablas de técnicas o de complicaciones que puedes tener en el día a día laboral. Hablando con otros compañeros siempre puedes solventarlas o mejorar. Es por ello que siempre aprendes cosas nuevas u otras técnicas.
Lo peor que tienen las ferias es que nuestra mercancía viaja muy mal, en sentido de que tiene que ir muy bien envuelta y es frágil. Si no empaquetas bien en la caja o furgón se puede astillar, porque la cerámica abulta mucho y el sitio es el que es.
– Gonzalo de Alfarería Aparicio
No hay productos mejores ni peores para vender en ferias, cada artesano elabora sus productos partiendo de que el producto gustará. Sí te puedo decir que los productos que son útiles y originales, que tienen una funcionalidad, tienen más salida, son más vendibles.Un producto que sea sólo decorativo tiene que ser muy bueno y tener un encanto especial para que tenga una buena aceptación.
– Juan José de Forja Lebrija
Lo mejor de vender en ferias es que puedo enseñar todos los productos que hacemos. La gente, al estar en la calle, valora más la artesanía. Siempre vendo más productos en ferias que en mi tienda, ya que en la tienda sí que alguna vez vendemos algo, pero nos dedicamos más a la reparación de bolsos y fabricación a medida de productos.
Lo peor es esa gente que no valora el trabajo, que sólo se fija en el precio y que no piensa que lleva muchas horas de trabajo el realizar por ejemplo un monedero, un bolso… Pero he de decir que por suerte es muy poca gente la que nos toca así.
– Mar Berdejo de Artesanía en piel Berdejo
Lo mejor de las ferias es el compañerismo entre alfareros. Hoy en día puedo decir que somos una gran familia en la que existe una competencia sana y que nos ayuda a crecer. Cada año cuando comienza la época de ferias es un momento de alegría al reencontrarnos.
Lo peor es dejar durante días a tu familia y tener que salir sin saber si te irá bien o no. Como en todo, hay años y ferias en las que no vendes mucho y vuelves a casa un poco desanimado.
– José Ángel de Severino Boix
– Háblanos de alguna anécdota curiosa que te haya ocurrido
Empecé haciendo mis demostraciones gracias a una señora que me preguntó si daría clases en la feria y me di cuenta de que a mí nunca me llamarían para dar clases. Así que pedí que me dejara usar las máquinas a un distribuidor y escribí en mi blog y en las redes que estaría enseñando gratis cómo hacer acolchados con la máquina en un stand. Gracias a esa señora pude darme cuenta que si yo no me muevo nadie lo hará por mí.
Muchas veces creemos que es imposible, pero yo animo a la gente a tomar la iniciativa, total, el NO ya lo tienes, todo lo demás depende de tu constancia y capacidad de sorprender.
– Alfonsina Uriburu de Quilting Colors
Pues la verdad es que no recuerdo en particular alguna y todas las que he tenido son positivas y están relacionadas con otros compañeros artesanos. Ah, sí. La mejor anécdota es que gracias al reconocimiento de fuera de mi pueblo ahora soy reconocida y vienen al taller mis vecinos a comprar. Porque lo mío es un oficio tradicional de O Grove que se llama Collareira y al que no siempre se le dio la importancia que tenía. Ahora mismo no hay relevo generacional. Es ahora que el pueblo le está dando la importancia que tiene. Esa es la mejor anécdota.
Me han ocurrido bastantes anécdotas a lo largo de estos años. Quizá una de las mejores y más bonitas que me ha ocurrido es que dos amigas mías que no se conocían entre ellas, y que eran además clientas, se reconocieron una a otra los pendientes y colgantes que llevaban (por el estilo personal de mis diseños), y hablando y preguntando se dieron cuenta de que ambas eran amigas mías, con el tiempo se hicieron amigas entre ellas también.
Como siempre que trabajas de cara al público, convives con las anécdotas. Entre mis productos, vendo abanicos que los expongo con un soporte. Me ha pasado más de una vez que me pregunten para comprar el expositor en lugar del abanico. Cuando tienes el stand relleno de producto, resulta gracioso que se fijen justamente en lo que no está a la venta.
– Anna Albert de Art en seda
Anécdotas simpáticas o peculiares no tenemos. Cuando vas a ferias hablas con mucha gente que se interesa por el oficio y te hacen preguntas sobre la profesión. Si llevas el torno para dar demostraciones del oficio siempre hay gente que quiere probar y una vez empiezan y ven la dificultad del mismo o que necesitas mucha práctica ya ven que no es tan fácil como parece.
– Gonzalo de Alfarería Aparicio
Las ferias son visitadas por cantidades de personas con conocimientos muy diversos y con personalidades diferentes que valoran más o menos los trabajos que ofrecen los artesanos. Me sorprendo a veces con la chulería de muchas personas, que en algunas ocasiones suelen vacilar con los acompañantes que visitan los stands de los mercados dando a entender que son manitas y hacen de todo, o que su primo, hermano o familiar también son artistas mejores. En algunas ocasiones por respeto callamos e ignoramos el momento, pues algunos lo dicen con don de superioridad.
– Juan José de Forja Lebrija
La buena cara que pone la gente cuando le consigues reproducir algún producto antiguo que tienen y que normalmente suele ser muy sentimental para ellos ya que viene de algún familiar cercano.
– Mar Berdejo de Artesanía en piel Berdejo
Anécdotas tengo muchas, pero ahora mismo se me ocurre la cantidad de fotos que siempre hacen a una montaña de botijos que suelo poner en mi stand. Mis compañeros siempre me comentan que si cobrara por cada foto hoy sería rico.
– José Ángel de Severino Boix
– Volviendo a tu primera experiencia en una feria, ¿qué consejo te darías a ti misma si pudieras volver atrás?
Mi instinto para confiar en las personas adecuadas me ha salvado muchas veces. Apostar por marcas reconocidas pero que tengan un grupo humano valioso es un acierto.
Creo que “me recomendaría“ creer en mí misma, ya que muchas veces no sabes si estás haciendo lo correcto porque nada se hace de la noche a la mañana y lleva mucho tiempo invertido y trabajo en lo que crees que puede funcionar. Y lo más complicado es que nadie te entiende hasta que no lo ve.
– Alfonsina Uriburu de Quilting Colors
Pues exponer el producto de forma atractiva y con muchísima luz.
Si pudiera darme un consejo a mi yo de hace 18 años me aconsejaría salir más al extranjero a ferias. Creo que los artesanos que lo han hecho han podido dar un salto de calidad a sus carreras.
Como primeriza llegué a asistir a ferias donde no me sentía nada identificada. Han salido de debajo de las piedras múltiples organizadores inexpertos o interesados más en la cantidad que en la calidad y la profesionalidad. En realidad, ellos se aseguran un sueldo y los artesanos asumimos un alto riesgo. Por lo tanto, en ocasiones me encontré vendiendo mis sedas al lado del que vende embutido o queso. Esto es una feria mal organizada y sin criterio alguno, pues la alimentación debe siempre estar aparte por distintos motivos.
Cuando eliges una feria tienes que tener muy claro tu objetivo e identificarte con la propuesta que se te ofrece.
– Anna Albert de Art en seda
El consejo que me daría es que siempre llevas muchísima mercancía para exponer y vender y habría que organizarse mejor, jejeje.
– Gonzalo de Alfarería Aparicio
Nunca existe una mala feria porque todas te enseñan algo nuevo que no podrías haber trasladado a la siguiente para ir mejorando si no hubieras hecho la anterior, y así es la cadena. La superación una tras otra es el objetivo y si una sale nefasta te convences de que la próxima no será tan mala o al menos te lo pones como objetivo. Si no piensas así dejarías de asistir a ellas. En todo se saca algo positivo por muy mala y dura que sea. Sólo haciendo muchas terminas adquiriendo una destreza en este tipo de eventos. Las experiencias de unas y otras te crean un instinto que es el que te profesionaliza en ellas.
– Juan José de Forja Lebrija
Sobre todo que hay que tener mucha paciencia, ya que como te comentaba antes toda las personas no valoran igual tu trabajo y a veces te dan malas contestaciones. Cuando era más joven contestaba, ahora directamente las ignoro porque no merece la pena. Prefiero ser mucho mas amable con esas personas que de verdad valoran nuestro trabajo, aunque luego no se lleven el producto por el precio o porque no les encaje.
– Mar Berdejo de Artesanía en piel Berdejo
Que me dijeran que, aunque se trata de un sector difícil y que ha vivido épocas duras, hay que mantener la ilusión y siempre estar atentos a los gustos y deseos de los clientes. Mezclar tradición con innovación suele ser una buena receta.
– José Ángel de Severino Boix
¿Te animas a responder tú alguna de estas preguntas?
Venga, que quiero conocer tus experiencias en ferias de artesanía. Te espero en los comentarios 😉
Un abrazo,
Beatriz
Si te ha gustado el post te animo a que lo compartas en las redes sociales para que llegue a más gente. ¡Te lo agradeceré enormemente!
Sobre Beatriz
Comentarios 2
El contenido me gusto y me gustaria participar en alguna de sus ferias
del Artículo
Hola Randolf,
Puedes descargarte el calendario de ferias donde aparece el contacto de los organizadores para que te puedas poner en contacto con ellos en caso de que te interesen. Te dejo este post que será de tu interés en el que tienes un botón para suscribirte y recibir el link de acceso al archivo con las ferias: 101 mercados y ferias de artesanía en España
Un abrazo
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